miércoles, 22 de abril de 2009

Queriendo a las paredes



Las paredes, los espacios, son los testigos silenciosos de nuestra vida, por qué no suponer que ellos absorben nuestro dolor, nuestras emociones, la energía de las personas que viven con nosotros. Al hacer más limpiezas profundas, descubro cada vez más lo que está impregnado en mi casa. Hay paredes en donde el llanto, la furia, la sordidez, el dolor, las maldiciones han hecho sus resonancias, a las paredes también hay que acariciarlas, hay que pedirles perdón, hay que besarlas, quererlas, son esas paredes las que contienen nuestra intimidad; mejor si nos ven con los ojos limpios y no empañados.

Mis plantas me saludan todos los días, yo les digo que son hermosas, que las quiero, las riego no sólo con agua, sino con mi cariño, ellas se mueven, se ponen más lindas todavía, son felices de estar con nosotros; no creo que se trate de ser una máquina que expende amor, pero orgánicamente nuestro entorno vital y los seres con los que compartimos nuestra vida han de ser los mejores depositarios de nuestros afectos, finalmente son los que nos cubren, los que nos acogen, los que nos abrazan.

domingo, 12 de abril de 2009

inter

Cuando las inconexionescerebralessesucedenunonopuedesinodejarlasinterconctarsejajajaquécagadaquélocuraquéfrenesíquéansiasquéfelicidad!!!!!!!!